El ser humano ya causó la extinción de especies hace 100.000 años

Las olas de extinciones que se produjeron hace 100.000 años, que eliminaron a algunos de los animales más grandes del mundo, fueron causadas por el ser humano y el cambio climático, según una nueva investigación de la Universidad de Cambridge, publicada en la revista PNAS.El ser humano ya causó la extinción de especies hace 100.000 años.

Mediante el examen de la extinción ocurrida durante el Cuaternario tardío (hace 700.000 años), pero centrándose principalmente en los últimos 100.000 años, los científicos han sido capaces de evaluar la importancia relativa de los diferentes factores que causaron la extinción de gran parte de la megafauna terrestre del mundo -los animales de 44 kg, o más. Estas extinciones incluyen a los mamuts de Norteamérica y Eurasia, los mastodontes y los perezosos gigantes de las Américas, el rinoceronte lanudo de Europa, los canguros ywombats gigantes de Australia, y las moas gigantes (aves no voladoras) de Nueva Zelanda.

Los investigadores utilizaron datos de un núcleo de hielo de la Antártida, uno de los más largos registros de funcionamiento de los cambios en el clima de la Tierra- que abarca los últimos cientos de miles de años. También, recopilaron información sobre la llegada de los humanos modernos de África a cinco masas diferentes (América del Norte, América del Sur, la mayor parte de Eurasia, Australia y Nueva Zelanda). Leer más de esta entrada

Científicos rusos «resucitan» una planta de la edad de hielo

En lainformacion.com  21/2/2012.

En la famosa película de animación «La edad de hielo» hay una ardilla que se pasa la vida intentando recoger semillas y enterrarlas en la nieve. Imaginemos una escena parecida en la realidad, hace 30.000 años en algún lugar de Siberia. La ardilla entierra algunos frutos bajo el hielo y estos permanecen allí hasta que un grupo de científicos los recuperan, siembran una de las semillas y obtienen una planta.

Esto es exactamente lo que acaban de poner en práctica un grupo de investigadores rusos cuyo trabajo publica la revista Proceedings of the National Academy of Sciences (PNAS). El equipo ha conseguido plantar y hacer crecer con éxito un ejemplar de Silene stenophyllaa partir de los restos de un fruto. Se trata de la semilla más antigua que se ha hecho brotar hasta ahora.

Las plantas de Silene stenophylla siguen creciendo hoy en día en la tundra siberiana y presentan diferencias muy sutiles con la planta regenerada, que pueden permitir estudiar en profundidad el proceso de evolución de estas plantas.

Hasta ahora, las plantas más antiguas devueltas a la vida habían sido unas semillas de palmera almacenadas durante 2.000 años en suelo de Israel. El lugar donde se hallaron las semillas es un bancal del río Kolyma, en Siberia, y es una zona habitual de búsqueda de huesos de mamut. Las madrigueras están a 38 metros de profundidad bajo la superficie actual en una capa que contiene restos de mamíferos como bisontes, rinocerontes lanudos y ciervos, además de mamuts.

El estudio demuestra que el tejido puede conservarse durante decenas de miles de años y abre el camino, según los investigadores, a la posible «resurrección» a partir de material genético, de animales del Holoceno y Pleistoceno. Un equipo de investigadores japoneses trabaja en la misma zona en busca de restos de mamut suficientemente bien preservados como para permitir la regeneración de uno de estos animales.

Leer más >>

Hace 40.000 años el sur de Andalucía era tan frío como la Escandinavia actual

En Público.es  17/2/2012

Hace 40.000 años la temperatura media anual de la turbera de El Padul, un área situada en la provincia de Granada, oscilaba entre los 9 y los 11 grados centígrados, más o menos la misma que tienen hoy en día en el sur de la península Escandinava y Dinamarca.

Esta es la principal conclusión de un estudio realizado por un equipo de científicos del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) y que acaba de publicarse en la revista Quaternary Science Rewiews.

Los investigadores han llegado a esta conclusión tras estudiar los restos de tres mamuts lanudos encontrados en la turbera en 1983, los más meridionales registrados en Europa.

Los especímenes estudiados datan de unos episodios muy fríos y secos que afectaron a toda Europa, llegando incluso al sur de la Península Ibérica, hace entre 30.000 y 40.000 años.

«A partir del análisis de isótopos estables realizados en restos de dientes y huesos hemos visto que estos mamuts vivieron en una área esteparia bastante árida, que podría estar situada a decenas o cientos de kilómetros al oeste de El Padul, y que puntualmente, cuando las condiciones climáticas eran especialmente extremas, migraban a la zona de la turbera», explica el investigador del CSIC Antonio Delgado, del Instituto Andaluz de Ciencias de la Tierra.

Los grandes mamíferos, como los elefantes o los mamuts lanudos, necesitan grandes cantidades de agua y comida fresca a diario, lo que deja una señal isotópica en sus tejidos capaz de dar pistas sobre las condiciones climáticas de la época en la que vivieron.

Leer más >>