México y España darán en breve un significativo paso al aliarse para investigar y proteger los fondos arqueológicos submarinos

Tereixa Constenla. El País. 11 MAY 2014 – 00:24 CET
Algo se mueve bajo el agua. La libertad de los cazatesoros para explotar a sus anchas el patrimonio histórico sumergido se va achicando. México y España darán en breve un significativo paso al aliarse para investigar y proteger los fondos arqueológicos submarinos. Durante la próxima visita de Estado del presidente Enrique Peña Nieto a España, prevista para los días 9 y 10 de junio, ambos países firmarán un memorando de entendimiento “para la cooperación en la gestión, investigación, protección, conservación y preservación de recursos y sitios del Patrimonio Cultural Subacuático”, según ha confirmado el Ministerio de Asuntos Exteriores.

El acuerdo, que suscribirán el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte y el Instituto Nacional de Antropología e Historia de México (INAH), despejaría una hipotética pugna diplomática por los restos del mítico Juncal, un galeón español del siglo XVII hundido durante su travesía entre Veracruz y La Habana con un millón de monedas de plata y reales y que el INAH lleva años investigando.juncal

“La colaboración científica y de protección legal es indispensable entre ambos países, ya que tenemos una historia marítima tejida en conjunto a lo largo de varios siglos. Además, es la oportunidad para generar un modelo de participación conjunta y mostrar que trabajando en equipo se logran mejores resultados que discutiendo a favor o en contra de los dos países. La ciencia y el conocimiento no tienen fronteras”, defiende Pilar Luna, subdirectora de Arqueología Subacuática del INAH y figura emblemática en la defensa del patrimonio subacuático , en un correo electrónico.

En las aguas de México, el instituto ha contabilizado más de 300 pecios. La Armada española, por su parte, ha documentado allí el hundimiento de 36 barcos propios —en todo el mundo se han inventariado hasta el momento 1.580 naufragios españoles—, gracias a un proyecto de investigación que le permitió rastrear sus principales archivos (Viso del Marqués, Madrid y Murcia).

Los documentos históricos resultaron cruciales para decantar a favor de España el pleito contra Odyssey por el tesoro de La Mercedes y lo han sido para reconstruir la peripecia novelesca del Juncal.

El navío, que había zarpado de Veracruz con más de 300 personas a bordo y una carga valiosa de plata, metales preciosos, chocolate, sedas y tintes, también despertó el apetito de la empresa de cazatesoros. En 2009 Odyssey intentó sin éxito que el Gobierno de México le autorizase los trabajos para localizar el galeón.

No fue el primer buscador de tesoros que olfateó el potencial delJuncal. En los años setenta varias empresas se interesaron por el pecio. Su afán alertó a la Administración mexicana, que ha mantenido una férrea oposición frente a los expoliadores. La búsqueda del navío se convirtió en un asunto de Estado. Se ha reconstruido su historia a partir de archivos de México, España, Colombia, Guatemala, Cuba e Inglaterra y se han realizado tres campañas con un buque oceanográfico de la Universidad de México para rastrear un área de 1.500 kilómetros cuadrados en la Sonda de Campeche, donde se estima que se produjo el hundimiento.

“Alan Turing fue esencial para ganar la Segunda Guerra Mundial”

  27/10/2012 en Materia. ENTREVISTA | Pedro Bernal, ex director del Centro Superior de Estudios de la Defensa Nacional.

La segunda mitad de 1940 y la primera de 1942 fueron conocidas por las tripulaciones de submarinos alemanes como los tiempos felices. Durante esos meses, sus victorias en la campaña del Atlántico fueron numerosas y sus riesgos, limitados. Como cuenta Pedro Bernal, teniente general del Ejército del Aire y ex director del Centro Superior de Estudios de la Defensa Nacional (CESEDEN), esas dos etapas de triunfos coinciden con la inclusión de novedades dentro de Enigma, la máquina empleada por Alemania para sus comunicaciones seguras durante la Segunda Guerra Mundial.AlanTuring-Bletchley

Esta relación entre los triunfos aliados y su capacidad para interceptar las comunicaciones enemigas ofrece una idea del valor del trabajo del matemático Alan Turing y todo el equipo que trabajó desde la mansión de Bletchley Park, en Buckinghamshire (Inglaterra), para desencriptar los mensajes nazis. En una conferencia enmarcada en el simposio internacional El legado de Alan Turing, organizado por la Fundación Ramón Areces en el centenario de su nacimiento, Bernal ofreció su visión sobre la relevancia del trabajo de inteligencia del matemático británico, que pudo acortar la guerra hasta dos años y fue esencial para la victoria aliada.

¿Habrían ganado la guerra los aliados sin Turing?

No sé si sin Ultra [el programa británico para romper los códigos alemanes] o sin Turing, pero desde luego sin las labores de inteligencia que desarrollaron, no. Creo que la importancia de este trabajo se podría valorar aún mejor si pudiésemos aplicar un método científico riguroso para ver qué cantidad exacta de mensajes se consiguió descifrar y cuándo. Se podría establecer una medida del éxito de la inteligencia mucho más precisa, pero por la propia naturaleza de los materiales de los que estamos hablando, todo eso ha sido confidencial y ha estado clasificado. Pero en cualquier caso, creo que en aquel combate de las armas que se trasladó a las ondas, sin el trabajo de Ultra, posiblemente, no se habría ganado la batalla del Atlántico, y creo que el trabajo de Turing, si no fue una causa excluyente, desde luego fue un factor esencial para el triunfo.

Usted ha observado una relación entre las innovaciones alemanas en sus sistemas de encriptación y etapas de más éxitos militares para sus ejércitos justo a continuación. ¿Por qué no introdujeron esas innovaciones con más frecuencia?

Hay un debate, todavía hoy, sobre hasta qué punto los alemanes sabían que eran vulnerables en algún aspecto, por aspectos de diseño de la máquina o por procedimiento. Creo que ellos lo sospechaban, aunque no tenían certeza. Por otro lado, incluso cuando capturaban alguna máquina, había quien decía que daba igual, porque, aunque tuviesen la máquina o los códigos, la utilización que se estaba haciendo de ellos y los cambios que se estaban realizando día a día harían imposible que los enemigos accediesen a la información. Pero entiendo que ellos sospechaban que algo funcionaba mal porque también veían que cuando introducían un cambio, observaban una mejora que después con el tiempo se difuminaba.

¿Pudieron hacer algo más para evitar que se interceptasen sus mensajes?

Ellos hacían cambios de carácter disciplinario, de protocolos, pero para mí hay algo más que podían haber hecho. Basaron tanto sus mensajes en Enigma que posiblemente con eso facilitaron el que redes o mensajes que no eran tan opacos pudieran ser descifrados y comprometiesen el resto. Si hubieran concentrado la utilización de Enigma para aquellos mensajes de importancia capital, y el resto los hubiesen transmitido por otras redes, habrían dificultado mucho más la labor a quienes querían romper el código. Leer más de esta entrada

Arqueólogos acusan al Ministerio de Defensa británico de permitir a Odissey el ‘saqueo’ del HMS Victory

El Ministerio de Defensa británico se enfrenta a una batalla legal y las preguntas que pueda hacerle el parlamento tras permitir a la empresa norteamericana Odissey Marine Exploration excavar con afán de lucro el pecio de un buque de guerra británico del siglo XVIII: el HMS Victory, un predecesor del famoso navío del almirante Nelson que hoy puede visitarse aún en Portsmouth. Lord Renfrew es uno de los principales arqueólogos que condenan el acuerdo financiero para excavar el que fue considerado como el  buque más poderoso del mundo en el momento de hundirse en una tormenta en el Canal de la Mancha en 1744.

HMS Victory

Una imagen de lo que el HMS Victory puede ser apareció emitida por Odyssey Marine Exploration en 2009. Fotografía: John Batchelor / Odyssey Marine / PA

A cambio de la excavación de los restos históricos del buque, que pueden incluir oro y plata por valor de millones de libras, Odyssey tiene derecho a recibir «un porcentaje del valor justo de los artefactos recuperados» o bien «los propios artefactos en lugar de dinero en efectivo«.

Lord Renfrew, un renombrado académico de Cambridge, dijo: «Eso está en contra de la convención de la Unesco, que establece que el patrimonio cultural subacuático no puede ser vendido o explotado con fines comerciales. Odissey es un rescatador comercial. No está claro cuál es el pago que se puede obtener que no sea por la venta de los artefactos que se extraerían.. lo que, por supuesto, es el negocio habitual de Odyssey. Extraer los objetos simplemente para ponerlos a la venta sería considerado por la mayoría de los arqueólogos como un saqueo«. Dos cañones de bronce ya se han recuperado de los restos del naufragio y se vendieron al Museo Nacional de la Marina Real por 50.000 US $, una compra financiada con cargo a la subvención del Ministerio de Defensa. Lord Renfrew, dijo: «Suena como si un museo nacional estuviera pagando por los cañones que ya son propiedad de la nación«.   Leer más de esta entrada

‘El corazón del océano’: Una novela sobre la primera expedición de mujeres al Nuevo Mundo.

Fuertes, intrépidas y aventureras, así fueron las mujeres españolas que cruzaron el océano Atlántico tras la conquista de América y que, según cuenta la escritora Elvira Menéndez en su libro «El corazón del océano« contribuyeron al intercambio racial y cultural «que cambió medio mundo«.

El corazón del océano

El corazón del océano. Elvira Menéndez.

Menéndez indagó durante años en la vida de 80 mujeres que, encabezadas por Doña Mencía de Calderón, se embarcaron en una expedición, cincuenta años después de la llegada de Cristóbal Colón a América, para casarse con los conquistadores españoles que se estaban amancebando con las indígenas. En una entrevista en la Casa de América de Madrid, donde ha relatado las peripecias de ésta, inusual para la época, «caravana de mujeres», la escritora reivindica la aportación que realizaron a la transformación de aquella sociedad que se desarrollaba a miles de kilómetros de España.

«Su historia desapareció seguramente por ser mujeres, sin embargo, su función fue muy importante, porque todas las élites posteriores descendieron de ellas. Su aporte vital y cultural transformó toda la zona«, sostiene Menéndez.

El área a la que se refiere es la actual Asunción (Paraguay), capital entonces de lo que se conocía como Río de la Plata, donde los españoles estaban reconociendo a los hijos que tenían con las indígenas. «Quizá esa fuera una de las pocas cosas buenas que hicieron, reconocer a sus descendientes, pero eso constituía un problema para la Corona española que veía peligrar sus dominios«, explica la escritora.

La misión de las 80 mujeres sería entonces «poblar, es decir, tener descendencia, para solucionar un asunto de tintes políticos, pero para ellas fue también un viaje interior, una transformación, el conocimiento de la libertad, la naturaleza y una nueva cultura. Muchas acabaron casadas con mestizos«.

A través de esta historia novelada, que la autora escribió «en un momento de crisis» por la enfermedad de su madre, Menéndez relata el terrible viaje al que se enfrentaron, con fuertes tempestades, ataques de piratas, y el envite de la conocida como «la peste del mar», es decir el escorbuto. «De las 80 consiguieron llegar más o menos la mitad, pero las que llegaron trajeron probablemente cosas tan importantes como la gastronomía de hoy, la dieta mediterránea. También los bailes y la música, un intercambio racial y cultural que nunca se resalta demasiado«, explica.

Sostiene también que las integrantes de aquella expedición fueron, además, mujeres «afortunadas» que, en muchos de los casos, «eligieron viajar para desembarazarse de las restricciones que como mujeres tenían en España en una época en la que todavía se discutía si tenían alma o no«. «Algunas, como la protagonista, sabían incluso escribir, y probablemente, después de superar aquel duro viaje, se enfrentarían a aquellos hombres de otra manera, con carácter y arrojo«, añade.    Leer más de esta entrada

Navegar entre el Mediterráneo y el Mar Rojo

Artículo por John Cooper/ Trad. por Eugeni López Vanyó.

Es el año 638 dC , el «Año de las cenizas» en la Península Arábiga, que se ve acosada por una terrible sequía. Apenas seis años después de la muerte del profeta Mahoma, las ciudades santas de La Meca y Medina se encuentran en grave peligro, sus ciudadanos, y muchos refugiados del campo, se enfrentan a la inanición. Buscando asistencia, el califa ‘Umar ibn al-Jattab escribe desde Medina a ‘Amr ibn al-As, su general en Egipto, instándole a enviar alimentos para paliar el hambre en el Hiyaz, el corazón del mundo islámicoDAVID RUMSEY MAP COLLECTION‘Amr todavía no había dominado Egipto, cuando recibió órdenes del califa, sin embargo el registro histórico nos cuenta que hizo lo que debía, enviando una descomunal caravana de camellos cargados de alimentos, probablemente en su mayor parte trigo y cebada, a ‘Umar. La caravana hizo su camino desde el valle del Nilo a través de la península del Sinaí, y luego hacia el sur por las montañas de Hiyaz a Medina. Un viaje de unos 1300 kilómetros que les costó un mes.

El líder de la caravana llevaba una respuesta de ‘Amr al califa. «Yo os he enviado los camellos«, escribió. «El primer camello está con usted en Medina, el último me acaba de salir de Egipto.» Entre ambos, dice Ibn ‘Abd al-Hakam, historiador egipcio del siglo IX,  una fila ininterrumpida de animales llevó la generosidad del Nilo hasta el Hiyaz. Cuando llegaron a Medina, ‘Umar asignó un camello, con su carga, a cada hogar. Tanto los animales como su carga fueron consumidos por los beneficiarios que padecían hambre. Otras caravanas llegaron procedentes de las tierras hacia el norte, y la catástrofe se evitó.

El esfuerzo, sin embargo, había llevado las posibilidades del transporte por caravana a sus límites y la vulnerabilidad de las ciudades santas, así como la importancia de la riqueza de Egipto, no pasó desapercibida para el califa. ‘Umar escribió de nuevo a ‘Amr con un plan. «Me gustaría que se excavara un canal desde el Nilo de Egipto, de manera que sus aguas fluyeran hacia el mar Rojo«, Ibn ‘Abd al-Hakam cita además a ‘Umar diciendo:  «De esa manera, será más fácil transportar los alimentos a la Meca y Medina. Consultad entre vosotros para resolver el asunto.«

La idea del califa no era tan extraordinaria como pudiera parecer. De hecho, se basaba en la memoria de un canal que ya había existido cuando Egipto estaba bajo la dominación romana, y por el cual los buques que transportaban grano de Egipto ya habían navegado en direccion al Hiyaz en el pasado. En el momento de la conquista islámica de Egipto, sin embargo, el canal había caído en desuso y estaba bloqueado con arena y escombros.

Los compañeros de ‘Amr estaban perturbados por el plan del califa ‘Umar, y los líderes de los coptos nativos de Egipto se mostraron molestos sobre todo, porque dudaban de que el proyecto fuera comercialmente beneficioso para ellos, ya que beneficiaría principalmente a Arabia. Ibn ‘Abd al-Hakam informa que instaron a ‘Amr, para inculcar a ‘Umar, que el proyecto era «desmesurado. Inalcanzable. Sin salida«. Pero ‘Umar no podía ser disuadido. «Voy a dar orden de que ningún barco zarpe en el mar Rojo, excepto los que lleven alimentos para las gentes de La Meca y Medina«, afirmó.

Cuando ‘Amr se dio cuenta de que ‘Umar hablaba en serio, rápidamente se dedicó a la tarea de restaurar el antiguo canal hecho por los romanos. Según Ibn ‘Abd al-Hakam, un copto mostró a ‘Amr la ruta del maltrecho canal. A cambio, él y su familia quedaron exentos del impuesto de capitación. En su mayor parte, el Canal del Emir de los Creyentes, ya que asi fue bautizado en honor del califa, seguía la ruta cortada por el canal romano, con una excepción importante: Tenía que encontrar una nueva conexión con el Nilo para evitar terrenos ya destinados a la construcción de Fustat, la nueva capital del Egipto islámico, y predecesora de El Cairo moderno. La boca del canal nuevo estaría situada en la plaza de Sayyida Zaynab, hoy en pleno corazón de El Cairo.    Leer más de esta entrada

El último viaje del ‘Exxon Valdez’

El ‘Exxon Valdez’, que el 24 de marzo de 1989 encalló en las costas del estrecho del Príncipe Guillermo (Alaska), provocando uno de los mayores vertidos de petróleo (el vertido del Golfo de México en 2010 fue ocho veces mayor y el del Prestige en 2002 aproximadamente de la misma magnitud) y una de las peores catástrofes ecológicas de la historia, navega en estos momentos hacia Singapur, su último destino, donde será achatarrado tras su venta por 16 millones de dólares.

Entregado en diciembre de 1986 a la naviera Exxon, el superpetrolero mide 301 metros de largo, 50 de ancho y era capaz de transportar 1,5 millones de barriles de crudo en sus bodegas.

Exxon Valdez

El ‘Exxon Valdez’, remolcado tras provocar un desastre ecológico en Alaska en 1989. | AP

El barco hacía regularmente el trayecto entre la terminal petrolífera de Valdez (Alaska) y los puertos de la costa oeste de Estados Unidos. En la noche del 24 de marzo de 1989, cuando navegaba a las órdenes del capitán Joseph Hazelwood (cuya carrera se hundió como el barco) rumbo al puerto californiano de Long Beach, debido a una serie de errores y negligencias, el ‘Exxon Valdez’ encalló en el arrecife Bligh, vertiendo al mar entre 41,6 y 121 millones de litros de crudo, el equivalente a la capacidad de entre 16 y 48 piscinas olímpicas.

Tras ser reflotado, la nave llegó el 10 de junio a San Diego (California), para ser reparada. A final de aquel año el buque, rebautizado ‘Exxon Mediterranean’, volvió a hacerse a la mar, pero no regresó a Alaska, ya que las autoridades de aquel estado habían prohibido por ley que el barco navegase por sus aguas.

En los 90, el ‘Exxon Mediterranean’ fue rebautizado como ‘SeaRiver Mediterranean’, posteriormente ‘S/R Mediterranean’, para acabar simplemente como ‘Mediterranean’. En 2005 el barco fue vendido a una compañía china, que lo rebautizó como ‘Dong Fang Ocean’. Tres años después, el buque fue reconvertido al transporte de mineral de hierro.    Leer más de esta entrada

El «séptimo continente» es obra humana y básicamente de plástico

Ya denuncié este tema en febrero posteando un artículo de Javier Salas en Publico.es titulado «La basura tóxica del mar se sirve fría en su mesa», sin embargo el caso me parece tan grave que bien merece un nuevo post. Esta vez se trata de un artículo aparecido en ABC.es y en el cual se denomina irónicamente a la mega-basura flotante como «séptimo continente» de nuestro planeta. Algo habrá que hacer, pero…¿quién y con qué fondos se soluciona esto? A mi modo de ver la solución tiene dos vertientes: hay que sacar la aspiradora y además dejar de consumir materiales no biodegradables.  Y hay que empezar ya.

Por J. de Jorge – Existen muchos ejemplos de cómo la soberbia y la indiferencia humanas convierten el planeta en algo parecido a una gran cloaca, pero uno de los más impresionantes, tristemente, es un remolino de millones de toneladas de plástico que se concentra en medio del Pacífico, a unos 1.000 kilómetros de Hawai.

El «continente de plástico» acumula todos los desperdicios imaginables

Conocido como el «gran parche de basura del Pacífico», la «gran isla de basura», la «gran sopa de plástico» o el «séptimo continente», este vertedero marítimo tiene unas dimensiones increíbles. Se calcula que ocupa de 1,7 millones a 3,4 millones de km cuadrados, más o menos el equivalente de tres a siete veces España, y pesa unos 3,5 millones de toneladas. Una catástrofe ecológica que, por desgracia, no deja de crecer. Ahora, una expedición científica francesa liderada por el explorador Patrick Deixonne se dirigirá a esta isla de residuos para examinar su composición y advertir al mundo de su dramática presencia.

La expedición partirá el 2 de mayo desde San Diego (EE.UU.) a bordo de L’Elan, una goleta de dos palos del año 1938. Recorrerá 4.630 kilómetros entre California y Hawai, donde el explorador Charles Moore descubrió accidentalmente esta increíble placa de plástico en 1997. Hasta el momento, solo dos expediciones americanas han estudiado la zona, en 2006 y 2009. Deixonne, miembro de la sociedad de exploradores franceses (SEF), decidió iniciar esta aventura tras observar por sí mismo los residuos durante una carrera transatlántica en solitario hace tres años.      Leer más de esta entrada

El Museo Arqueológico Nacional de Atenas presenta una exposición del naufragio de Antikythera

Todas las antigüedades recuperadas entre 1900, 1901 y 1976 del legendario pecio encontrado frente a la isla de Anticitera, al sur del Peloponeso entre Citera y Creta, se presentarán por primera vez en una exposición temporal titulada «El naufragio de Anticitera: El barco, los tesoros y el Mecanismo«, a partir de abril de 2012 y que durará un año, en el Museo Arqueológico Nacional de Atenas.

Modelo del mecanismo de Anticitera realizado por Mogi Vicentini en 2007

Modelo del mecanismo de Anticitera realizado por Mogi Vicentini en 2007

La recuperación del mismo naufragio fue la primera gran expedición arqueológica submarina que se llevó a cabo en Grecia. Fue llevada a cabo por pescadores de esponjas, con la asistencia de la Marina Real Griega desde 1900 hasta 1901. Se mostrarán cartas, recortes de prensa, fotografías y películas que documentan la historia de su descubrimiento y recuperación, así como los métodos empleados.

La segunda expedición de investigación submarina se llevó a cabo en 1976 por el servicio arqueológico griego y con la participación del legendario Jacques-Yves Cousteau y su buque oceanográfico «Calypso«.

En total, 378 artefactos serán presentados al público, incluyendo esculturas y objetos de lujo, cerámica, vidrio y recipientes de bronce, monedas, joyas, piezas de una cama, partes del mismo naufragio, e incluso restos de comida de una época de la navegación comercial en la que el transporte marítimo de obras de arte desde Oriente hacia el Occidente había llegado a su punto culminante. Entre los hallazgos está la computadora analógica más antigua conocida, el mecanismo de Anticitera, una calculadora astronómica fechada en el siglo II aC, así como la estatua de bronce del Efebo de Anticitera, los cuales sin duda atraerán la atención de la audiencia.

Los restos del naufragio están fechados aproximadamente entre el 60-50 antes de Cristo, a pesar de que su cargamento observa una antigüedad que oscila desde el siglo IV aC hasta el siglo I aC. El estudio de tan variada carga tiene mucho que ver con la circulación y el comercio en el Mediterráneo oriental de objetos artísticos, científicos y valiosos con destino a las élites romanas debido al aumento de su gusto por lo estético y por la ostentación una vez terminado el periodo helenístico y a punto de ser enterrada la República romana.

La exposición no se sustenta por fondos públicos sino que se realiza con fondos de la empresa relojera suiza Hublot, aunque los programas educativos que se ofrecen de forma gratuita son patrocinados por el banco griego privado, Alpha Bank.

Durante la exposición, en la sección de la web oficial del Museo Nacional titulada  «Objeto del mes».  podrán admirarse las obras de arte seleccionadas a partir de los restos del naufragio.

Fuente:  Greek Reporter 6/3/2012

Más información sobre el mecanismo en:  Antikythera Mechanism Research Project (AMRP)

Otros artículos: ABC.es   10/4/2012  «El antepasado griego del ordenador se expone en Atenas»

Cirebon: El tesoro de un naufragio en Indonesia sale a la venta de nuevo

El «tesoro de Cirebon» fue descubierto en un pecio frente al puerto de Cirebon en la isla indonesia de Java y contiene cerca de 250.000 objetos preciosos, incluyendo obras de arte en cristal, perlas, bronce y oro. «El hallazgo es sin duda el más grande encontrado en el sudeste de Asia en términos de calidad y en cantidad«, dijo Luc Heymans, el director belga de Cosmix  Underwater Research Ltd., la firma con sede en Dubai que «excavó» el pecio.

El Tesoro de Cirebon

Un hombre sostiene un espejo de bronce chino del s.X, preteneciente al periodo de las Cinco Dinastías y los Diez Reinos (907-960) en una sala de exposición en el sur de Yakarta. Imagen: ROMEO GACAD / AFP

El tesoro fue recuperado de los restos de un buque mercante – de nacionalidad desconocida – cuya antigüedad se remonta a alrededor del 960 dC y que fue descubierto por pescadores indonesios a 57 metros de profundidad. Fueron necesarias cerca de 22.000 inmersiones entre entre abril de 2004 y octubre de 2005 para excavar el hallazgo, que fue financiado privadamente en virtud de un acuerdo con las autoridades indonesias.

El tesoro muestra los objetos que se comerciaban entre el Lejano y Medio Oriente, incluyendo roca tallada y cristal propio de la dinastía fatimí de Egipto, vasos para beber mesopotámicos, perlas del Golfo, bronce y oro de Malasia, así como exquisita porcelana de la China imperial. Después de seis años de trámites burocráticos, los «excavadores», finalmente obtuvieron el permiso para vender el tesoro, aunque previamente tuvieron que donar parte del mismo al gobierno de Indonesia.   Leer más de esta entrada

James Cameron completa con éxito su viaje al lugar más profundo del océano

Actualización 26/3/2012:

lainformación.com: 26/3/2012 «James Cameron completa con éxito su viaje al lugar más profundo del océano»

El cineasta estadounidense James Cameron completó con éxito su expedición a la fosa de las Marianas, el punto más profundo del océano, y se convirtió en la primera persona que ha descendido en solitario a ese lugar, según National Geographic. Cameron,  comenzó su descenso en un minisubmarino fabricado por su equipo de ingenieros en colaboración con National Geographic a primera hora local del lunes y tocó fondo en la noche del domingo.

National Geographic estuvo informando a través de Twitter del viaje y del momento en que Cameron tocó fondo.

En otros medios:

Artículos relacionados:

Artículo original 9/3/2012:

James Cameron vuelve a sumergirse en una nueva aventura. El cineasta emprenderá en próximas semanas una expedición a las profundidades de la Fosa de las Marianas, el punto más profundo de la Tierra, que se encuentra a unos 11,2 kilómetros por debajo de la superficie del océano.James Cameron En El Documental Del Titanic Para National Geographic

La inmersión de Cameron a bordo del ‘Deepsea Challenge‘, un vehículo sumergible especialmente diseñado para ello, marca el inicio de un proyecto científico que une al director, a la Sociedad National Geographic y a Rolex para realizar esta exploración.

La expedición, denominada también ‘Deepsea Challenge’, se grabará y formará parte de un documental que contará los esfuerzos científicos y técnicos que hay detrás de esta inmersión histórica. El evento será objeto de un documental para el canal, que se estrenará próximamente, y un artículo para la Revista National Geographic.

Esta expedición se convertirá en la primera exploración científica hecha por un vehículo tripulado a la Fosa de las Marianas, el punto más bajo de la Tierra, situado en las profundidades del océano Pacífico, a unos 322 kilómetros al suroeste de Guam.

El director de cine, recientemente nombrado explorador residente de National Geographic, tiene previsto pasar seis horas en el fondo del Foso para recoger muestras que más tarde serán utilizadas en investigaciones de biología marina, microbiología, astrobiología, geología marina y geofísica. Leer más de esta entrada