En una marea de datos digitales, un arca llena de libros
05/03/2012 Deja un comentario
RICHMOND, California – En un almacén de madera en un suburbio industrial, el siglo XX se almacena por si acaso hay un desastre digital. Doce metros de contenedores apilados de dos en dos se rellenan con los más importantes (así como algunos de los más olvidables) libros de la era. Cada semana, llegan 20.000 volúmenes nuevos, las donaciones de muchos de ellos proceden de bibliotecas y universidades deseosas por deshacerse de un material que no tiene cabida ya en la era de Internet.
Destinados a la inmortalidad un día de la semana pasada fueron «Política del Indígena Americano en el siglo XX», «Todas las nuevas manualidades para Halloween», «Qué hacer cuando su hijo o hija se divorcia», o «Kiss Temptation «, una novela romántica.
«Queremos recoger una copia de cada libro», dijo Brewster Kahle, que ha gastado 3 millones de dólares para comprar y operar este depósito situado justo al norte de San Francisco. «Nunca se sabe lo que va a pintar el retrato de una cultura.»
Como la sociedad está abarcando todas las formas de entretenimiento digital, esta arca de Noé post-moderna hace justo lo contrario. Un empresario de Silicon Valley que hizo su fortuna vendiendo una empresa de Minería de Datos a Amazon.com en 1999, Mr. Kahle fundó y dirige el Internet Archive , una organización sin ánimo de lucro dedicada a la preservación de páginas web – 150.000 millones hasta la fecha – y haciendo que sus textos permanezcan siempre disponibles. Pero a pesar de que comenzó su Archivo en el ámbito del reino digital, ahora también pretende guardar textos físicos.
«Debemos mantener el pasado aunque estemos inventando un nuevo futuro», afirmó. «Si la Biblioteca de Alejandría hubiera hecho una copia de cada libro y la hubiera enviado a la India o China, ahora tendríamos otras obras de Aristóteles y de Eurípides. Una copia en una sola institución no es suficiente».